Un hombre se sienta solo en una silla a un lado de la carretera. Le vemos desde arriba, rodeado de adoquines grises colocados ordenadamente, una silla de plástico rota y algunos pilones esparcidos por el bordillo. Un gato callejero sale del encuadre y se aleja del hombre. Parece solitario, la única persona que habita el lugar en el que parece tan cómodamente sentado. Sin embargo, a medida que el ojo recorre el encuadre, el espectador descubre algo más: una vasta ciudad que se proyecta más allá de la calle y detrás de la silla del hombre. Esta imagen cierra el ensayo fotográfico de Sarah Pannell Sehir, un estudio sosegado de la vida urbana.
Posibilidades, descubrimiento e historias: éstos son algunos de los elementos más eficaces de un ensayo fotográfico. Las colecciones de imágenes pueden ayudar a producir una narrativa, evocar emociones y guiar al espectador a través de una o varias perspectivas. Un ensayo fotográfico bien ejecutado no depende de un título ni de ningún conocimiento previo de su creador; narra por sí mismo, moviendo al espectador a través de sensaciones, lecciones y reacciones.
Ensayos fotográficos famosos como Médico rural de W. Eugene Smith o de Gordon Parks La familia Harlem son aclamados por mostrar una mirada a la vida de los enfermos y los empobrecidos. Otros ensayos fotográficos bien realizados ofrecen una nueva forma de ver lo cotidiano, como la serie fotográfica de Peter Funch, muy comentada 42 y Vanderbilt, para el que Funch fotografió la misma esquina durante nueve años. Como demuestran las experiencias de estos fotógrafos con el medio, una colección de fotos puede animar espacios y actitudes. Los ensayos fotográficos sólidos pueden dar voz a individuos marginados y poner de relieve experiencias que antes pasaban desapercibidas.
No hace falta ser un fotógrafo documental para crear un ensayo fotográfico impactante. Los ensayos fotográficos pueden abarcar cualquier tema, desde la fotografía de naturaleza hasta el retrato o las fotos de boda. Hemos hablado con algunos fotógrafos para que nos den su punto de vista sobre lo que hace que un ensayo fotográfico sea bueno y sus consejos para que cualquier fotógrafo pueda iniciarse en este medio. He aquí seis pasos a seguir para crear un ensayo fotográfico que cuente una historia memorable.
Elige un tema específico para tu ensayo fotográfico.
Hay dos tipos de ensayos fotográficos: los narrativos y los temáticos. Los ensayos fotográficos narrativos se centran en una historia que cuentas al espectador, mientras que los ensayos fotográficos temáticos hablan de un tema concreto.
El método más natural para elegir un tema para tu ensayo fotográfico es basarte en lo que conoces. Fotografíe lo que experimenta. Ya sean personas, objetos o cosas en las que piensas a lo largo del día, la accesibilidad es la clave. Los temas o conceptos más comunes para empezar son las emociones (representar la tristeza o la felicidad) o las experiencias (la vida cotidiana, la vida en la ciudad).
Para el fotógrafo Sharon Pannenplanificar un ensayo fotográfico es tan sencillo como "elegir un tema que te resulte interesante o sobre el que quieras hacer una declaración".
En Papel e historias, una serie fotográfica de Sharon Pannen para ¡Revista Schön! Magazine.
Considera los temas de tus fotos.
Los sujetos de tus fotografías, humanos o no, llenarán el espacio de tus fotos e influirán en el estado de ánimo o la idea que intentas representar. El sujeto puede determinar si tus fotos se consideran interesantes o no. "Siempre intento encontrar a alguien que me llame la atención. Me gusta especialmente ver cómo incide la luz en su cara y cómo una determinada estética puede aportar algo a su persona", dice el fotógrafo Victoria Wojtan.
Aunque los temas y su factor de interés son, bueno, subjetivos, al considerar tus temas, deberías preguntarte por tu público. ¿Quieren ver esto otras personas? ¿Es mi tema representativo de la idea más amplia que intenta transmitir mi ensayo fotográfico? En tus proyectos puede participar gente que conoces o gente que acabas de conocer.
"La mayoría de los proyectos en los que trabajo consisten en retratar a desconocidos, por lo que siempre hay cierta tensión al acercarse a alguien para retratarlo", explica el fotógrafo. Taylor Dorrell. Para Wojtan, esa tensión puede ayudar a crear confianza con el sujeto y, de hecho, da lugar a imágenes más naturales: "Si hay tensión, suele deberse a que la persona no se deja fotografiar por nadie para algo que no sea un momento cándido o un selfie, y necesita orientación para posar. Esto me da la oportunidad de hacerles sentir más cómodos y dejarles ser ellos mismos. Suelo tener una cierta idea en mente, pero intento dejar que sucedan momentos orgánicos".
Intenta que las imágenes sean variadas.
Dependiendo del tema, hay algunos tipos de fotos que querrás utilizar para anclar tu ensayo. Una o dos fotos principales deben introducir lentamente al espectador en el tema. Estas fotos iniciales funcionarán de forma similar al párrafo introductorio de un ensayo escrito o de un artículo periodístico.
A partir de ahí, deberías considerar la posibilidad de seguir desarrollando tu narrativa introduciendo elementos como retratos, primeros planos, planos detalle y una foto final cuidadosamente seleccionada para dejar al espectador con la sensación que te propusiste producir en tus fotos. Considera que las imágenes iniciales y finales son los elementos más importantes de tu ensayo fotográfico y elígelas en consecuencia. Quieres que las primeras imágenes enganchen al espectador, y también quieres que las últimas dejen una impresión duradera y quizás ofrezcan una conclusión a la narrativa que has desarrollado.
Incluir distintos tipos de fotos, tomadas con diferentes distancias, ángulos y perspectivas, puede ayudar a captar la atención del espectador y añadir más textura a la serie.
Dice el fotógrafo Taylor Dorrell: "Cuando tengo un grupo de imágenes, tiendo a pensar en el color, la composición, el orden en que se tomaron, el tema y la relevancia para el concepto".
Del reportaje fotográfico de Taylor Dorrell Vallas blancas: "White Fences es una serie fotográfica en curso que explora el tema de la juventud suburbana en Estados Unidos, concretamente en el suburbio del medio oeste New Albany, Ohio".
Deja tus emociones a un lado.
La duda sobre uno mismo puede surgir fácilmente cuando se trabaja con la propia fotografía. El dicho de que somos nuestros peores críticos suele ser cierto. Puede resultar difícil seleccionar de forma objetiva las imágenes más interesantes a la hora de crear un ensayo fotográfico. Por este motivo, la elaboración de ensayos fotográficos es una práctica muy útil para desarrollar las habilidades de comisariado.
"Lo más importante para mí es recabar opiniones externas. Yo no lo hago lo suficiente, y tengo un sesgo a la hora de seleccionar imágenes que quizá no sean las más impactantes o la secuencia de imágenes más eficaz", dice Dorrell. Tu propia percepción de una fotografía puede enturbiar tu capacidad para juzgar si aporta algo o no a tu ensayo fotográfico. Esto es especialmente cierto cuando el ensayo trata temas personales. Por ejemplo, un ensayo fotográfico sobre tu familia puede ser difícil de evaluar, ya que tus propios sentimientos hacia los miembros de tu familia influirán en tu forma de hacer y ver las fotos. En este caso, los comentarios de los compañeros pueden ser muy valiosos para elaborar una serie sólida.
Recoger opiniones mientras preparas tu ensayo fotográfico puede ayudarte a determinar los puntos fuertes, los puntos débiles y las lagunas de la colección de fotos que has producido. Pide a tus amigos que te digan cuáles son sus favoritas, por qué les gustan y qué creen que buscas con el trabajo que has creado. Sus opiniones pueden servirte de guía, no sólo tus propias emociones.
Edita tu selección de fotos.
Más allá de la posproducción, la serie de fotos que elijas como ensayo determinará si has ejecutado tu tema o narrativa con eficacia. ¿Pueden las fotos contar por sí solas, sin palabras escritas, la historia que te has propuesto? ¿Tienen sentido juntas, en una secuencia lógica? El reportaje fotográfico perfecto ofrecerá a tu público una imagen completa de la narración, el tema o la esencia que pretendes captar.
Un buen método para reducir el número de imágenes es eliminar la mitad para ver si la narración sigue siendo igual de sólida con menos fotos. O, tal vez, elegir un número reducido de imágenes (entre cinco y diez) y utilizarlo como método para seleccionar las que mejor cuentan la historia.
Del reportaje fotográfico de Taylor Dorrell Sobre el Rin, en Vice.
Ponle un título a tu ensayo fotográfico y añade un texto conciso.
Por último, deberás crear un título y una declaración escrita para tu ensayo fotográfico. Esto ayudará a posicionar tu obra y puede permitir al espectador comprender plenamente tu intención, o al menos orientar su perspectiva.
Una declaración escrita y un título sólidos serán relevantes para su tema, detallarán su objetivo principal e introducirán su punto de vista. Es una oportunidad para aclarar tus intenciones al espectador y asegurarte de que se lleva una interpretación clara de tu trabajo. Dependiendo de tu ensayo fotográfico, es posible que quieras incluir varios párrafos de texto, pero incluso una o dos frases de fondo pueden ser suficientes para ampliar la comprensión de tu obra por parte del espectador.
Considera si te gustaría añadir la declaración escrita al principio de tu ensayo para introducirlo, o al final como conclusión. Cualquiera de los dos puede ser impactante, y depende de cómo te gustaría que la gente experimentara tu trabajo.
Por su reportaje fotográfico Vallas blancas, extraído anteriormente, Taylor Dorrell sólo escribió una frase de introducción. Pero para su serie Sobre el Rin, Dorell incluyó una declaración escrita más larga para acompañar la obra, que es "una serie fotográfica en curso que busca explorar el barrio de Cincinnati del mismo nombre y sus alrededores. La serie se inició en respuesta al tiroteo de Samuel DuBose, un hombre negro desarmado, por el oficial Ray Tensing de la Policía de la Universidad de Cincinnati, que ocurrió el 19 de julio de 2015." El texto de Dorell continúa ofreciendo más antecedentes sobre el proyecto, preparando al espectador con toda la información que necesita para entender el contexto del ensayo fotográfico.
Dependiendo de las motivaciones del ensayo fotográfico y del tipo de tema que represente, puede que sea necesario un texto más largo, o puede que unas pocas palabras sean suficientes.
Imagen de portada de Taylor Dorrell, extraída de su ensayo fotográfico Huracán sobre el azúcar.